Todos los sectores de la economía han sido permeados por el universo digital y el inmobiliario no es la excepción. Atrás están quedando los trámites presenciales, burocráticos, engorrosos y lentos, para dar cabida a los aceleradores inmobiliarios que revolucionarán el mercado de la vivienda en Colombia este año que viene, brindando, a todo el que lo necesite, seguridad, confianza, facilidad, agilidad e inclusión, todo de la mano de tecnología de punta y de una metodología 100% online, accesible, agradable, rápida y ecológica.
“La misión de un acelerador inmobiliario es democratizar, agilizar y transformar, a través de la innovación, esta industria, muy tradicional y estática, para brindarle a sus usuarios lo que hoy en día necesitan. Las preferencias de los usuarios han cambiado y ya están cansados de dinámicas muchas veces ineficientes e inseguras. Todas las personas pueden acceder a un acelerador inmobiliario, las que están interesadas en comprar y vender inmuebles y arrendar, este es un sistema en esencia incluyente.”, explica Juan Eduardo Contreras, Country Manager de Houm, la mayor inmobiliaria digital de Colombia y única con el modelo de acelerador inmobiliario del país.
Y es que el sector inmobiliario es uno de los que no para de crecer, a pesar del contexto económico nacional y mundial. De acuerdo con un estudio de la Dirección de Investigaciones Económicas de Bancolombia, la finca raíz tiene la capacidad de servir como activo de refugio en escenarios de alta inflación o desaceleración económica como el actual y, por eso, se espera que el sector inmobiliario tenga un crecimiento de 1,7 % en 2023. Por esta razón, debe ser transformado y optimizado.
En el mismo sentido, de acuerdo con la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, en 2023 continuará el crecimiento del sector inmobiliario pues venimos de un año 2022 con un récord de 234.592 nuevas viviendas vendidas, lo que significó el segundo mayor nivel en la historia reciente del mercado inmobiliario del país y un 28 % más que el promedio de los últimos años. Adicionalmente, en Colombia durante el tercer trimestre del 2022 la cantidad de viviendas alquiladas creció 8,97% frente a diciembre de 2021, de acuerdo con Fedelonjas.
Con este mercado en ascenso, los aceleradores inmobiliarios son necesarios para dar el dinamismo y crecimiento que necesita el sector y marcar la tendencia de este rubro en la economía del 2023, gracias a sus ventajas y posibilidades.
- Ahorro de tiempo y dinero: “Los propietarios de viviendas en arriendo sufren de una serie de dolores de cabeza. El primero es no tener el tiempo para ir a mostrar su propiedad, lo cual demora el proceso y prolonga la vacancia de la propiedad, perdiendo plata.”, dice Juan Eduardo Contreras, Country Manager de Houm.
En estos casos, un acelerador inmobiliario destina un asesor para que muestre el inmueble a posibles inquilinos o pueden agendar citas virtuales. Adicionalmente, el acelerador se encarga de la toma de fotos y videos que son difundidos con amplia visibilidad a través de portales de vivienda aliados, todo sin que el propietario deba desplazarse. Un acelerador inmobiliario puede mostrar una propiedad cada 8 minutos y gracias a esto, un inmueble puede arrendarse hasta 10 veces más rápido.
Para quienes, del otro lado, están buscando un inmueble en arriendo para vivir en él, también se benefician de la tecnología al poder visitar de forma rápida y ágil los inmuebles en los que está interesado, en las zonas y con los rangos de precio que le son afines a sus necesidades.
- Asesoría financiera: Más allá de un acompañamiento para mostrar su inmueble, un acelerador ofrece una asesoría integral, ya que muchos propietarios no saben calcular el precio justo y rentable de su inmueble según el sector, estrato, tamaño y amenidades, lo cual también puede demorar su proceso.
- Adiós al papeleo: Al encontrar un inquilino, vienen una serie de papeleos que también implican tiempo, costos y riesgos. Un acelerador inmobiliario permite tramitar y firmar, inclusive el contrato de arrendamiento, de forma 100% digital, pero con plena garantía de seguridad gracias a tecnología que evita delitos, falsificaciones y otros inconvenientes, lo cual beneficia también al nuevo inquilino e incluso hace que el acelerador inmobiliario también sea amigable con el medio ambiente y sostenible.
- Seguridad y confianza: De acuerdo con Contreras, “Otro de los dolores de cabeza más grandes de los propietarios de inmuebles para vivienda es que, una vez logran sortear todos estos trámites y consiguen un inquilino, nada garantiza que este sea cumplido y además cuide su inmueble.”
Un acelerador inmobiliario, además de la reducción de tiempo y costos, también vela por la tranquilidad del propietario, pues realiza un completo estudio de los aspirantes a tomar el inmueble en arriendo, en el cual analiza su perfil de riesgo, ingresos y antecedentes para asegurarse de escoger la mejor opción.
- Garantías y rentabilidad ¡No pierda plata!: Ante el riesgo de daños y no pago de gastos comunes, un acelerador inmobiliario da la oportunidad de acudir a pólizas que cubren estas eventualidades y gestionan directamente los trámites necesarios con el inquilino sin involucrar al dueño del inmueble.
- Aliado financiero: Así el inmueble esté desocupado, o el inquilino incumpla, el acelerador inmobiliario garantiza el pago del canon de arrendamiento mes a mes y, además, en caso de necesidad de liquidez inmediata, se puede solicitar el adelanto de hasta los seis siguientes cánones de arrendamiento, valor que se descontará de las cuotas del arriendo del inmueble hasta por 12 meses.